SHE-RA: TELARAÑA DE SOMBRAS - NUEVO CAP 17!! 2014 HAPPY BDAY SCORPIA!! :)

Adora contempla con asombro a la hermosa mujer que tiene en frente, una delicada guerrera cuya escultural figura, cubierta con sedas blancas y armadura dorada, ilumina las oscuras instalaciones del abandonado Castillo de Cristal. El viento detrás de ella juega con su lacio cabello, color cobrizo, haciendo que se mueva con suavidad hacia un lado, esto sumado a la pose heroica en la que se encuentra la muchacha, con ambas manos posicionadas en cada extremo de su delgada cintura, la convertiría en la musa perfecta para la inspiración de cualquier pintor que buscase retratar a una diosa caída del cielo.
La princesa de Eternia intenta hablarle, pero las palabras se ahogan en su garganta incluso antes que su mente pueda concretar alguna frase, pues la mujer en la que ella solía convertirse está allí junto a ella en la misma habitación sin mostrar alguna expresión de asombro, lo cual la confunde aún más.
Ariel llama a la recién llegada “She-Ra” y le pide ayuda, la guerrera dorada se mantiene distante y dirigiéndose a sus atónitos espectadores, les indica que la sigan antes que lleguen más enemigos. Luego, corre hacia el umbral del castillo, desapareciendo en medio de un colchón de nubes blancas.

Adora y sus amigos, en completo estado de perplejidad, se miran las caras mutuamente, como tratando de ponerse de acuerdo sobre qué hacer, si seguir a aquella milagrosa salvadora o quedarse en el oscuro castillo junto al cadáver de un Cazador de Sombras que yace bajo una enorme roca.
Antes de que alguno de ellos pudiera exponer su decisión, la impetuosa Ariel se dirige con prisa hacia la puerta para alcanzar a la mujer que para ella es su oportunidad de salvación, Kowl le grita que espere, pero ella responde a lo lejos que con no tienen que esconderse más. Adora y Spirit la siguen y cuando todos se encuentran fuera del castillo se paralizan al descubrir que una enorme nave Hordeana los espera allí. Entonces, Kowl susurra que de pronto la idea de pasar la noche dentro del abandonado lugar junto a un enemigo muerto no resulta tan mala después de todo.

Adora da un paso al frente para proteger a sus amigos y les sugiere no moverse hasta que ella lo indique. En su rostro se refleja gran determinación y valentía, pues ha dejado de lado el breve encuentro con su alter ego súper heroico encarnado. Sus ojos brillan con tal intensidad que la hacen ver tan amenazante como el filo de la espada que carga en su espalda de manera perpetua, la cual retira de su funda y la empuña hacia la nave de forma desafiante.
Al mismo tiempo, la ex capitana Hordeana analiza al vehículo a detalle, el cual reconoce como un avión de carga y descarta el hecho que cuente con artillería pesada o armamento de guerra. En ese momento, la mente estratega militar de Adora la ayuda a idear, en cuestión de segundos, un plan para reclamar la nave como premio y utilizarla para llegar a los Whispering Woods lo antes posible, cuando la compuerta principal se abre ella salta sin titubear y con espada en mano llega al interior de la nave, impulsada por las fuertes corrientes de aire.

Allí descubre que She-Ra la espera y cuando se prepara para luchar contra ella, la mujer de armadura se le acerca de manera muy serena y sonriendo le pide guardar su espada, pues no todo es lo que parece, aunque los hechos impliquen lo contrario.
Bajo la luz artificial de la cabina Adora descubre a la mujer detrás de la corona de oro y el vestido de seda, es Melog su duplicado mágico, quien una vez fue un monstruo de barro creado por Shadow Weaver para robar la fuerza de She-Ra, tarea que cumplió de manera exitosa, pero la bruja no predijo que cuando Melog absorbiera los poderes de la heroína también tomaría una porción de su bondadosa alma. Finalmente, utilizando el poder de la espada, She-Ra le dio a Melog una nueva oportunidad para redimirse y la convirtió en su gemela mágica. Ambas se abrazan y Melog le dice que sus sueños le ayudaron a encontrarla, antes que la princesa de Eternia pueda entender esta revelación, nota que detrás de ella aguarda un hombre alto vestido con armadura de combate Hordeana. Cuando el soldado se retira el yelmo, Adora lo reconoce como el General Saunders, un gran amigo suyo que se reveló contra la Evil Horde y valientemente luchó al lado de los Rebeldes para derrocarla y salvar a su familia.

Tanta emoción no cabe en el pecho de la princesa del poder, quien olvida por unos momentos que sus otros amigos están afuera, impacientes por saber que está sucediendo, sobre todo después del acto dramático que realizó al saltar varios metros hasta la nave, Melog bromea diciéndole que le faltó gritar para completar la escena. Momentos después, Adora se asoma por la puerta y levantando el pulgar indica a Spirit y los otros que no hay peligro y los invita a subir. Una vez que todos están a bordo, Saunders activa el piloto automático para unirse al grupo y darles la bienvenida oficial a su propia Rebelión, la cual él prefiere llamar “Cruzada Libertadora”, también les pide disculpas por haberlos asustado con la nave, pero desde que Hordak dejó Etheria, él y su grupo se apoderaron de Fright Zone y tomaron “prestado” una que otra maquinaria que los ayudase a combatir a las aterradoras fuerzas de Shadow Weaver.
Luego, Adora y sus amigos escuchan atentamente a Melog, que les cuenta cómo vivió algunos años como una ermitaña, descubriendo las maravillas de la vida que gracias a She-Ra pudo disfrutar. Sin embargo, poco tiempo después, cuando la oscuridad llegó y amenazó a tanta gente inocente, ella decidió que debía defender a Etheria y utilizó su fuerza para hacerlo. Fue así como conoció al General, al que rescató de una prisión de esclavos.

Cuando Adora le pregunta por qué se viste como She-Ra, Melog con una mano cerca del corazón le responde que lo hace para darle esperanza a la gente y un símbolo de justicia en el cual creer, pues en estos tiempos tan oscuros es lo que más se necesita, tener fe en que las cosas van a mejorar. Ariel sonríe al escuchar esto y siente que su búsqueda por un poder que la ayude a combatir a Shadow Weaver no ha sido en vano.

Melog también confiesa que la idea del disfraz no fue suya, sino de su amigo el pirata SeaHawk, al escuchar este nombre, el corazón de Adora empieza a latir muy rápido y una extraña sensación electrizantes recorre todo su cuerpo, impulsándola a preguntar por aquel hombre del que siempre ha estado enamorada. Saunders es quien le da la mala noticia de que “Hawk” no se encuentra en la nave con ellos, pero la reconforta el saber que él es parte esencial de su equipo y que en esos momentos se encontraba en una misión buscando aliados alrededor de toda Etheria para enfrentarse a la bruja. El General también le cuenta que está planeando una gran guerra para devolver la libertad a Etheria y que no descansará hasta lograrlo, pues la seguridad de su familia, que vive refugiada en las mazmorras de Fright Zone, depende de ello. Para concluir su reporte, le dice a Adora que ha estado monitoreando, a través de espías, los movimientos de la Gran Rebelión, quienes acaban de ganar hace poco una batalla en contra de uno de los fuertes militares y campos de concentración de esclavos de Shadow Weaver, y aunque lucharon bien y se merecieron la victoria, a él le preocupa la forma en que ellos están actuando, la cual él cataloga de imprudente e improvisada.

Al escuchar esto, Adora se preocupa y le pide que la lleve hasta los Whispering Woods, Saunders accede con la condición de que luego de dejarla allí, él se marchará ya que prefiere trabajar bajo sus propios términos, pues la vida de muchos dependen de él.

Cuando Adora agradece todo lo que él está haciendo por Etheria, la dura expresión de este noble hombre cambia y una tímida sonrisa se dibuja en su cara. Pero, los nervios y la preocupación llenan el estómago de la princesa, quien observa en el monitor la aproximación hasta el paradero de sus amigos, de quienes está a menos de dos horas de distancia y aunque debería estar feliz, algo le indica que su tan ansiado encuentro no será lo que ella espera.

Una nave hordeana cruza los tormentosos cielos de Etheria a gran velocidad. A bordo de esta pieza metálica, Adora y sus amigos son transportados por el valiente General Saunders, quien junto a Melog, un clon mágico de She-Ra, han formado una poderosa alianza en contra de las fuerzas oscuras que gobiernan el planeta.

Su destino es los Whispering Woods, un paradisiaco bosque cuyos hermosos y mágicos árboles de inmensas copas azules prohíben el ingreso a quienes tengan malas intenciones. Este encantado lugar es casi la única área verde sobreviviente al maleficio de Shadow Weaver y está libre de cualquier amenaza. Su frondoso interior, habitado por animales silvestres, criaturas místicas como duendes, hadas y Twiggets que se esconden en la exótica flora que abunda en este lugar adornado por majestuosos valles, sirve bondadosamente de refugio para todo aquel que lo necesite.

Allí encontrarán a la Gran Rebelión, el principal motivo que acapara toda la atención de la princesa de Eternia que, mirando fijamente las nubes negras a través de la ventana, se pierde en imaginar su reencuentro con Bow y Glimmer, sus dos mejores amigos, a quienes extraña mucho y ruega porque estén bien, ya que últimamente muchos de sus amigos han sufrido y perecido ante el caos desatado por las maquinaciones de la malvada hechicera.

Mientras ella divaga, Kowl y Ariel conversan, él le pregunta sobre su especialidad mágica, a lo que ella contesta que aún está perfeccionando sus habilidades y aunque es buena con la transmutación y el control de los elementos naturales, le cuesta mucho realizar un hechizo de tele transportación, motivo por el cual el búho color rosa se mofa de ella indicando que no debió haber prestado mucha atención a Castaspella, yaque la tele transportación es un hechizo de nivel básico para un aprendíz. Los pensamientos de Adora la tienen tan distante, que no logra escuchar el intercambio de insultos entre ambos. Sin embargo, ella regresa al mundo real de forma abrupta cuando se percata de que lo que cubre el cielo no son nubes, sino cazadores de sombras volando en manada. Melog al notar la inquietud de su “gemela” se acerca hasta ella para calmarla y le asegura que los cazadores de sombras no van a atacar la nave mientras ella esté cerca.

Adora no entiende esto y la joven mujer vestida de She-Ra le explica que los sombríos monstruos son ciegos y que solo pueden sentir la energía de las personas, es por esto que cuando alguien realiza magia ellos son atraídos por el despliegue de poder y a ella, por ser “mitad mágica”, la sienten como un repelente por ser una mezcla de dos fuerzas, luz y oscuridad, debido a que fue creada por Shadow Weaver y alterada por la magia de la espada.

Cuando Melog concluye su teoría, coge la mano de su “hermana” y le pide que se tranquilice y que disipe sus miedos, pues estos van a terminar alterando su confianza y no puede dejar que eso pase, porque la va a necesitar cuando las cosas se pongan más difíciles. Adora la abraza fuertemente y agradece su consejo, luego le pide que le cuente cómo fue que la encontró en el Castillo de Cristal, a lo que Melog le dice que ambas están unidas por un lazo empático y ella puede sentir sus emociones. Adora cae en cuenta de que Melog conoce su secreto y su duplicado mágico le dice que se siente más que orgullosa de vestir su manto y luchar bajo su nombre de batalla. El conmovedor momento de estas hermanas y la infantil pelea entre Kowl y Ariel concluyen con el anuncio del General Saunders, quien indica que es momento de abrocharse los cinturones pues van a aterrizar cerca a los Whispering Woods.

Momentos después, luego de un pacífico aterrizaje. El general se despide de la princesa y sus amigos. Él se acerca hasta ella y le entrega un comunicador para que lo llame cuando lo necesite, también le pide que guíe con sabiduría a la Rebelión, por otro lado Melog es más efusiva con su despedida pues abraza fuertemente a cada uno de ellos y con una gran sonrisa regresa a la nave con su compañero de equipo. Adora se despide agitando su mano derecha mientras ellos despegan con destino a Fright Zone, su base de operaciones.
Kowl se muestra realmente feliz pues se encuentra a pocos de kilómetros de su casa, Spirit también se siente contento pues es otro el aire que se respira de este lado del planeta. Para Ariel el regresar con la Rebelión le parece no haber avanzado nada en su lucha contra Shadow Weaver, pero Adora mantiene frescos los ánimos de su equipo y le dice recuerda la manera en la que trabaja el destino y que si se encontraron y llegaron hasta aquí, es porque están a puertas de lograr algo muy grande. Luego las dos jóvenes mujeres y los dos animales parlantes, fijan el rumbo hacia el campamento Rebelde.

Luego de una hora de camino, Adora y sus amigos finalmente llegan a la entrada del bosque, Ariel reta a Kowl a una carrera por quien llega más rápido hasta el bosque, él le dice que si ella intenta tele transportarse definitivamente debería coronarlo de una vez, Ariel le saca la lengua y corre rápidamente, él la llama tramposa y agiliza el vuelo, Adora y Spirit observan sorprendidos como los dos desaparecen a mitad del camino. Sin embargo, su sorpresa aumenta más cuando ellos los alcanzan y ven que han sido atrapados por una red metálica que los mantiene colgando de la copa de un árbol, la ex capitana Hordeana escucha pasos detrás de ella y cuando se voltea para ver de quien se trata, una red le cae encima, Spirit intenta correr hacia ella para ayudarla pero también es capturado. Luego de luchar un rato, Adora logra alcanzar el cuchillo que guardaba en su bota para liberarse pero antes que pudiera hacerlo aparece ante ella Netossa, quien retira la net y le ofrece su mano para levantarse.

La Rebelde de piel morena, lacios cabellos celestes y armadura color cobalto se emociona al ver a Adora y la abraza fuertemente agradeciendo a las diosas de Etheria por que escucharon sus ruegos, mientras libera a Spirit, ella se disculpa, explicando que su función es cuidar la entrada del bosque encantado, pues a veces algunos Ogros y otras criaturas horribles se acercan e intentan ingresar. Antes de que pudieran seguir conversando, Ariel y Kowl les piden ayuda y que los liberen de la trampa. Adora por bromear le pregunta a Netossa si pueden dejarlos allí un rato más, a lo cual su amiga con risas responde que lo haría pero no sería justo para las ardillas y aves que viven en aquel árbol.

Al rato, cuando Ariel y Kowl son finalmente bajados del árbol, Netossa se ofrece a llevarlos hasta el campamento. En el camino ella le dice a Adora que a paso ligero llegarán para la cena y que todos estarán felices de verla después de tanto tiempo, el escuchar esto hace que el corazón de la princesa se sienta contento, pero la nostalgia la toca nuevamente cuando se topa con un enorme árbol verde en cuyo centro se encuentra una hermosa mujer de finos rasgos tallada con los brazos extendidos, Kowl se posa en el hombro de la princesa y con los ojos cerrados y las manos cruzadas sobre la panza, le dice que este es el árbol de Perfuma, Netossa camina hasta el fuerte roble y les cuenta que gracias a ella la magia del bosque se encuentra intacta ante la carencia de un sol que pudiera fortalecer sus plantas. Adora se acerca a su amiga, convertida hoy en una planta, y tocando sus ramas le promete que su sacrificio no será en vano y que hará todo lo posible para recuperarla cuando expulse a la oscuridad de Etheria.

Después de caminar durante varios minutos, Adora y su grupo son abordados por el cálido aroma de pan recién horneado y contagiosas risas de niños mezcladas con música alegre, esto significa que finalmente han llegado al campamento Rebelde.
Cuando la princesa de Eternia se encuentra con la multitud, la música se detiene y todos se quedan observándola atónitos, incluso el solitario jovencito de cabello blanco y armadura de plata al que Adora no reconoce, pero por alguna razón le recuerda a Frosta. El silencio permite que los bosques murmuren y silben alegremente como si invitaran a los lugareños a festejar la llegada de una antigua y querida amiga. De pronto, un torbellino de sedas multicolor aparece y grita el nombre de Adora, se trata de Spinnerella, quien efusivamente se apropia del cuello de su amiga y salta de alegría. Todos los demás, motivados por el entusiasmo de la rebelde danzarina, se acercan hasta Adora para darle la bienvenida. El escándalo llama la atención de Bow, quien luego de ajustarse las botas se ve obligado a salir de su tienda para ver el motivo de tal alboroto.

Lo primero que él visualiza es a su amigo peludo Kowl y la alegría no cabe en su sonrisa, corre rápidamente y de un ágil salto llega hasta el búho rosado, que inmediatamente salta a los brazos de su amigo. Los ojos de Bow se humedecen un poco y apretando fuerte al pequeño peluche le dice que no vuelva a ir tras él nunca más. Adora interrumpe el momento pidiendo unirse al abrazo. En ese instante Bow, en total estado de perplejidad, suelta a Kowl que cae estrepitosamente al suelo, y se levanta sin pestañear mirando fijamente a quien él cree es una ilusión, intenta hablar pero no tiene palabras, finalmente solo sonríe y sus brazos se encuentran con los de ella y por un instante la escandalosa multitud a su alrededor, desapareció.

Por otro lado, Ariel también saluda a sus amigos y busca a Flutterina para contarle su gran aventura, en cambio se encuentra con Winter, el joven guerrero de la Ciudad de las Nieves, y se ruboriza con tan solo verlo, aunque él se mantiene totalmente indiferente con ella y cuando la aprendiz de hechicera, conteniendo todo su aliento y armándose de valor, logra decirle “hola”, él solo le agradece por haberle hecho ganar una apuesta con Bow, pues él sabía que una niña tan delicada no duraría fuera del bosque más de un mes. La furia que invade a Ariel hace que sus mejillas se tornen del color de su cabello, pero la paz regresa a ella cuando él confiesa que se alegra porque que nada malo le pasó, luego se acerca hasta ella y suavemente desliza su mano hasta su roja cabellera, acomoda un mechón detrás de la oreja de Ariel y con su otra mano acaricia su mentón. Ella cierra los ojos esperando recibir un beso, pero solo siente una brisa pasar de su lado, cuando se voltea logra ver a Winter alejarse.

Después de conversar un rato, Adora le pide a Bow que la lleve con Glimmer, pues quiere verla, aunque él insiste en que sería mejor esperar un rato y dejarlo a él hablar primero, pues Glimmer no es la misma desde lo que sucedió con su madre. Adora parece no entender razones y rápidamente se escabulle en la tienda de la heredera del trono de Brigth Moon. Adora encuentra a su amiga parada en frente de un espejo cepillando su hermoso cabello rosado, por unos segundos pasa desapercibida, pero cuando la llama por su nombre, Glimmer gira y al darle el encuentro, los ojos de ambas se llenan de lágrimas.

Adora se acerca hasta Glimmer, pero la joven mujer de vestido púrpura y joyas de plata le pide que no se le acerque, sin embargo la inercia hace que el cuerpo de la princesa de Eternia no obedezca la petición de la reina rebelde, que incesantemente repite lo mismo. Cuando las manos de Adoran tocan los brazos de Glimmer, ella grita “¡Fuera!” y acto seguido, sus ojos brillan de color fucsia y una gran explosión de energía rosa se produce y expulsa por los aires a Adora de la tienda. Ella aterriza sobre una mesa de madera, que se rompe por el impacto, y antes que pudiera reincorporarse, Glimmer, presa de ira, se le lanza encima estrangulándola con ambas manos mientras le grita que nunca debió regresar, le dice que Etheria y su madre pagaron por su egoísmo, que ella no estuvo allí para pelear junto a ellos.

Las fuerzas parecen haber abandonado a Adora, ella no esperaba un ataque tan brutal por parte de su amiga, quien la agarró totalmente desprevenida y cuyas palabras duelen más que sus golpes. No sabe cómo actuar, le falta el aire y siente un gran punzón en la espalda, cuando piensa que no podrá cumplir todas las promesas que ha hecho desde que regresó a Etheria, finalmente Glimmer se detiene. Pero no por voluntad propia, sino por que Bow la obligó a soltar a Adora, quien es auxiliada por Netossa y Spinnerella.

Adora recupera el aliento y logra decirle que ahorre sus energías para el enemigo, esto enfurece más a Glimmer, que esquiva a Bow y alcanza a darla una gran bofetada en la cara a la mujer que alguna vez quiso como a una hermana, haciendo que caiga al suelo. Luego se dirige a Bow y le recuerda donde está su lealtad, señalando el emblema del corazón que adorna la pechera de su armadura. Cabizbajo, el arquero se disculpa con Adora y se marcha detrás de Glimmer, quien rompe en llanto de dolor y frustración al llegar a su carpa.

Los ojos de Adora pesan cada vez más y su cabeza le da varias vueltas, su nariz reconoce el fino aroma del perfume de Spinerella, que le recuerda al jardín de su madre en el palacio de Eternos, finalmente la oscuridad que percibe entre cada parpadeo se hace infinita y no existe nada más para esta princesa, que se sumerge en un profundo sueño del que prefiere no despertar.

Perdida en la más desconcertante oscuridad se encuentra Adora, caminando descalza, sin poder ver más que las aureolas que forman sus propios irises. En esta fría, solitaria e infinita oscuridad de lo más profundo de su subconsciente, ella recorre un largo túnel que parece no tener fin. Al principio ella no sabe en donde está, lo único que la impulsa a seguir en movimiento es un doloroso punzón en la espalda, que aumenta cada vez más si se detiene. De pronto, llega hasta ella un delicado aroma a flores que, embriagándola con dulzura, atenúa su dolor. La secuencia se repite una y otra vez durante un par de minutos más, hasta que la florida fragancia finalmente la envuelve y la transporta hasta el más remoto de sus recuerdos,

Adora despierta en el hermoso jardín de su madre, la reina Marlena, en el palacio de Eternos, en Eternia, su hogar. Aquí, rodeada de flores, ella siente el calor de los delicados brazos de la reina, cuya melodiosa voz la arrulla junto a su pequeño hermano que descansa al lado. La serenidad del canto hace que ella se sienta segura y protegida, como si nada más existiera.

Pero instantáneamente el panorama cambia con el estruendo de un trueno y el olor a azufre reemplaza el de las rosas. Otro relámpago golpea con fuerza cegando todo y sumergiendo la visión de Adora nuevamente a la nada, ella no puede escuchar el canto de su madre ni sentir el calor de sus brazos, por el contrario, solo percibe gritos de furia y un espeluznante frío metálico que la sostiene con fuerza. Cuando un último rayo cae, se ilumina la monstruosa cara albina de Hordak, cuya jadeante risa retumba en los oídos de la princesa y la llena de temor. Su infantil llanto llena de ecos el lugar y se detiene cuando un remolino de energía la absorbe.

Cuando el recuerdo termina, este se aleja con la velocidad de la luz y Adora se desploma de rodillas en el túnel. El dolor vuelve a su espalda, la cual la siente húmeda y realiza que está sangrando, pero ya no quiere seguir, está demasiado asustada para hacerlo. De pronto, se da cuenta de que alguien está detrás de ella y suavemente peina sus cabellos, aunque no logra ver de quien se trata, reconoce la caricia que viene acompañada de la voz pausada de una mujer mayor, cuyas palabras llenas de cariño la reconfortan. La extraña mujer en la oscuridad la llama preciosa y le ruega que por todos los “lomos verdes” no tenga miedo pues no está sola y ella la va a guiar, aunque no sabe bien qué dirección tomar, lo único de lo que pueden estar seguras es que deben continuar el camino.

Adora se levanta y logra divisar con claridad el enorme sombrero con parches que cubre el rostro de la anciana, cuyos enormes ojos amarillos iluminan, como pequeños faros, el lugar y su gran sonrisa devuelve la tranquilidad al corazón de la princesa de Eternia, quien abraza inmediatamente a esta mujer de baja estatura, piel morada como la vid y enmarañados cabellos canos, a la cual ella quiere como a una madre más. Madame Razz le devuelve el abrazo para luego apartarse delicadamente y sujetándo de los hombros a Adora, le dice que se siente muy feliz de verla después de tanto tiempo, pero que ya encontrarán un momento para charlar luego y tomar té juntas, pero que deben seguir el sendero del túnel porque hay algo que deben descubrir. La princesa coge con seguridad la mano de la brujailla y avanza n firmeza.

Mientras Adora está sumergida en lo más recóndito de sus pensamientos, Ariel y Kowl se encuentran al lado de su cuerpo en la enfermería del campamento rebelde. La joven aprendiz de hechicera se siente realmente preocupada por el estado de Adora y mientras empieza a rezar un cantico de sanación, al mismo tiempo seca con un paño húmedo la delicada frente de su amiga, que arde como el fuego mismo.

Desesperado por ver una mejora en Adora, Kowl le pide a Ariel que utilice su magia para ayudarla, sin dudarlo, la pelirroja acude al libro de Norwyn, que guarda celosamente en su bolso de cuero, sujetado firmemente a su delgada cintura. Al tenerlo en sus manos, rápidamente busca un encantamiento de curación pero luego de leerlo, le comenta al peludo búho volador que el éxito de este hechizo requiere de una fuerza elemental externa de la cual ella pueda drenar energía. Él horrorizado le pide mantener su distancia, pues aunque es muy sabio no cuenta con mucha energía, pero ella lo tranquiliza diciendo que no pensaba precisamente en él sino en el muchacho al que le dedica todos sus suspiros, Winter.

Del otro lado del campamento, en la tienda de Glimmer, ella es asistida por dos doncellas que la ayudan a colocarse su armadura de batalla, una ajustada pieza de cuero morado, cuya pechera está adornada con el ángel de Bright Moon incrustado en plata y diamantes. Al momento en que terminan de atar sus botas irrumpe Netossa abruptamente en el lugar. Ella está realmente alterada y le exige una explicación por el ataque contra Adora. Glimmer les pide a sus ayudantes que las dejen solas, luego toma asiento en su trono y mientras se coloca sus brazaletes de plata le indica a su compañera rebelde que partirán en pocas horas hacia el reino de Bright Moon.

Al ver que no obtiene alguna respuesta por parte de la heredera de Angella, la estratega rebelde se frustra, luego respira hondamente y apela a su conciencia, recordándole los tiempos tan duros en los que viven día a día y que su deber es buscar la unión para prevalecer y luchar contra aquellos que atentan contra la paz, no contra quien lucha por ella. Los ojos de Glimmer se llenan de lágrimas, pues sabe que Netossa tiene razón, pero su dolor nubla su juicio y se le hace imposible el perdonar a Adora, a quien ella consideraba su heroína y un modelo a seguir. Cuando descubrió que ella y She-Ra eran una sola persona, no se sintió traicionada por la desconfianza de haberle ocultado aquel secreto, por el contrario, la apoyó y cuando ella pidió voluntarios que la acompañen a librar una terrible guerra en su hogar, Eternia, contra las fuerzas de Hordak y el Rey Hiss, Glimmer fue la primera en unirse a la causa, a pesar de los ruegos de su madre que le pidió que no fuera por temor a perderla y sin embargo aún lo hizo y todo por lealtad y cariño a Adora, de lo cual se arrepiente pues cuando más necesitó de ella, no estuvo allí para ayudarle a superar la muerte de su madre, que pereció a manos de Shadow Weaver. Aquel fatídico día el mundo de la alegre e inocente Glimmer se derrumbó, así como todo buen sentimiento que pudiera tener por Adora.
Netossa al notar tanta amargura contenida en Glimmer, se acerca hasta ella y le pregunta si está dispuesta a dejar atrás el dolor, pues finalmente terminará consumiéndola y no es lo que su madre habría querido. La expresión en el rostro de la joven de cabello rosa cambia por una más dura cuando se menciona a Angella y conteniendo el llanto le dice a Netossa con voz firme que en vez de perder su tiempo jugando a ser la mediadora de Adora, debería prepararse para la batalla que van a luchar para liberar a Bright Moon.

Acto seguido, la morena de capa metálica sale furiosa de la carpa y se dirige hasta Bow, quien se encuentra preparando su arsenal de flechas para la pelea. Ella le dice que no va a acompañarlos mientras Adora se encuentra herida en la enfermería. Bow con una gran expresión de tristeza le responde que él se encargará de que se arreglen las cosas entre ellas una vez que hayan regresado victoriosos. Esto parece tener poco sentido para Netossa, quien se mantiene firme en su decisión de no acompañarlos.

Y lejos de allí, en el plano astral, dentro de los pensamientos de Adora, ella es guiada por Madame Razz con quien recorre diferentes pasajes de su vida, pero por insistencia de la anciana no se detiene a recordarlos, pues ella dice que se le ha dado solo una oportunidad de mostrarle el camino y no pueden desperdiciarla. Adora le pregunta insistentemente que es lo que busca, a lo que la mujer vestida con arrapos rojos le contesta que en su memoria reside la clave para vencer a Shadow Weaver.

De regreso a la enfermería, Kowl lleva a Winter hasta Ariel, allí le explican al joven guerrero de ojos turquesa, que necesitan su ayuda pues el guante gélido que porta lo convierte en el perfecto candidato elemental para completar el hechizo de curación. Al principio él se niega diciendo que ni siquiera conoce a Adora y que no va a permitir que nadie profane un tesoro de su tribu que él se ganó en batalla para poder buscar a Frosta y llevarla hasta el reino que tanto la extraña. Kowl le cuenta que Adora era una gran amiga de la emperatriz del hielo y que si al menos no lo hace por ella, que lo haga por Frosta, pues es lo que ella hubiera hecho en su lugar.

Winter observa detenidamente a Adora y nota que ella realmente está sufriendo, ve las marcas de las manos de Glimmer en su cuello, sus delicados brazos tienen moretones y arañazos producto a la estrepitosa caída contra la mesa, de la cual se le clavó una gran astilla en la espalda. A distancia siente el calor de la fiebre en aumento y siente ganas de hacer todo lo que esté a su alcance por aliviarla, pues además de considerarla una mujer de gran belleza, Kowl le dijo que era alguien importante para Frosta y es todo lo que él necesita saber para ayudarla.

De pronto, Ariel lo empuja y le pregunta, un poco celosa, por qué mira tanto a Adora a lo que él responde, fingiendo poco interés, que se ha quedado sorprendido de ver que Glimmer realmente sabe dar una paliza. Kowl sale en defensa de la agraviada y responde que fue un ataque inesperado, porque de haber prevenido esto, Adora la hubiera neutralizado en un segundo. Ariel les pide a los dos guardar silencio pues necesita que la ayuden porque el hechizo es un poco difícil de realizar y necesitará de gran concentración.

En la mente de Adora, Madame Razz se detiene frente a una enorme puerta de metal y con un amable gesto indica que es aquí donde la joven guerrera debe mirar, pero que ella no puede acompañarla pues sea lo que fuese que esté allí detrás solo le corresponde a Adora descubrirlo. Luego hace una pausa y le pregunta si ella también escucha un canto, obteniendo una negativa como respuesta.

Mientras que en la enfermería, Ariel se encuentra de pie frente al cuerpo de Adora, ella posa una mano sobre la frente de la convaleciente guerrera y con la otra sujeta el gélido guante de Winter, mientras pronuncia el hechizo de curación, sus almendrados ojos brillan y la energía del guantelete de Winter empieza a fluir a través de ella para curar a su amiga, que se ve cubierta con una intensa luz.
Al mismo tiempo, en el limbo, Madame cierra sus ojos para concentrarse en el canto que tanto la perturba, cuando los abre, apresura a Adora para que entre en la puerta pues presiente que hay una fuerza interfiriendo y aunque es pura y buena, peca de imprudente y atenta contra la revelación.

En el preciso instante en que la princesa atraviesa la misteriosa puerta se convierte en una versión infantil de sí misma y se percata que está dentro de la recámara de Shadow Weaver en Fright Zone. Al ser descubierta por la dueña de la alcoba, Adora cumple con su mandato de acercarse hasta la oscura mujer, quien además de admirar su hermoso rostro, se dispone a cepillar los largos cabellos dorados de la niña mientras procede a contarle un cuento que trata sobre una mujer llamada Light Spinner, cuya belleza era tal que debía cubrir su rostro con un velo pues despertaba en los hombres la locura del deseo y en las mujeres una gran envidia.

Aunque otros consideraran esto un don, para ella era una gran maldición pues estaba prohibida de conocer al verdadero amor o tener una amistad sincera. Fue entonces que decidió enlistarse en el camino de la magia y se convirtió en aprendiz de un poderoso mago con la secreta intención de poder retirar su maldición y conseguir una vida normal con alguien que la amase por quien realmente ella era y no por cómo se viera. Pero como la magia blanca es desinteresada y no funciona para el auto beneficio de su portador, nunca fue capaz de lograr su cometido. Hasta que un día apareció un hombre del exterior que sin percatarse de su belleza, vio su gran potencial y le ofreció el poder que tanto anhelaba a cambio de los secretos de su gente.

Pero Light Spinner no tenía un pueblo que la quisiera de verdad, así que no debía serles leal y contribuyó con aquel hombre milagroso que cumplió con la parte del trato y le otorgó la fuerza oscura de un poderoso cristal, pero del cual solo pudo tomar un poco por descuidada, pues si se hubiera deshecho antes de su celoso maestro, él no habría destruido la fuente de poder que le dio una nueva vida a Light Spinner como la gran hechicera en la que se convirtió con el pasar del tiempo. Pero ese fue el precio de su descuido y todo en esta vida se cobra, pues nada es gratis, ni siquiera un escondite. Finalizando su relato, Shadow Weaver convierte el peine en una navaja y envolviendo el cabello de Adora en una coleta, lo corta de un solo tirón para el desmallo de la pequeña que sale de allí con lágrimas en los ojos mientras la risa de la malvada mujer la persigue.

Cuando Adora escapa de aquel recuerdo, despierta sobresaltada con un grito. Con ambos ojos sin pestañear observa detenidamente su entorno y descubre que no se encuentra más en el túnel ni en aquella pesadilla con Shadow Weaver, más bien está sentada en una cama dentro de una gran habitación y junto a ella están Kowl, Ariel y el muchacho de pelo blanco al que vio al llegar al campamento Rebelde.
Ariel y Kowl la abrazan fuertemente y se alegran porque está bien, la aprendíz de Castaspella revisa rápidamente el cuerpo de Adora y se sorprende porque no tiene herida o rasguño alguno. Winter se mantiene distante de aquel cálido momento y sale de la enfermería sin que lo noten, para cuando Ariel lo hace es muy tarde, él ya se fue y ella se lamenta porque no pudo agradecer su ayuda. En ese instante ingresa Netossa para ver como se encuentra Adora y se queda totalmente en shock al verla de pie e ilesa.

Pero la princesa les pide un momento para poner en orden sus pensamientos, lo cual no logra hacer debido a que se percata que en la cama de al lado reposa una catatónica Madame Razz, con los ojos abiertos y una expresión seria, la cual le rompe el corazón de inmediato. Mientras sus amigos salen del lugar para darle privacidad, Adora sujeta la mano de la anciana y le agradece por acompañarla y guiarla a través de aquel laberinto de sueños.
Momentos después cuando Adora secó sus lágrimas y se cambió de ropa, ella sale de la enfermería y le pide a Netossa que la lleve hasta Glimmer para poner las cosas en claro. La rebelde le informa que eso será imposible pues ella y su grupo han partido con destino a Bright Moon hace dos horas.
Entonces Adora le pide que se aliste para acompañarla, pues si las cosas salen mal, ellas estarán allí para ayudarlos.

A pesar de la inquietante oscuridad que lo rodea y los grotescos ogros que lo vigilan, el majestuoso castillo de Bright Moon se impone con garbo ante las aberraciones que ahora lo habitan y haciendo honor a sus antiguos monarcas emana una cálida luz, la cual hace que sus muros, labrados en oro macizo, reflejen a la luna misma.

Esta magnífica edificación, cuyo emblema es la silueta de un ángel, representó la libertad de Etheria y como reino principal de este planeta fue regido por la paz y el orden que Miccah y Angella tanta protegían. Sin embargo, Bright Moon no pudo librarse de las macabras acciones de Shadow Weaver, que luego de ejecutar a su hermosa reina y convertir a sus habitantes en estatuas, convirtió el castillo en uno de sus cuarteles generales, pero aun así, no pudo ganar acceso a la fuente de su poder, la Piedra Lunar, una esfera de gran energía mística que permanece oculta en una cámara secreta dentro del corazón del palacio y solo la familia real conoce el acceso para llegar hasta ella.

Mientras feroces criaturas guardan celosamente su entrada, en la cámara principal se encuentra Scorpia, una maligna amalgama entre humana y escorpión, frente a un enorme espejo que adorna el lugar. Ella de manera impaciente azota su acorazada y mortal cola, de un lado hacia otro, ante la espera de que Shadow Weaver se manifieste y para esto solo pasan breves segundos y entonces, del espejo empieza a surgir una oscura niebla que abriga a la encapuchada mujer de vestido rojo y capa negra, cuyos ojos amarillos arden como el fuego. Aunque su presencia es solo una proyección astral, la fuerza que emana es tal, que produce escalofríos en la coraza de Scorpia, que se arrodilla ante la bruja como signo de respeto, pero solo recibe reproches por parte de este ser espectral que se mantiene quieto en las sombras y le reclama por su derrota contra los Rebeldes en el campamento de los Ogros, días atrás.

La venenosa mujer insecto se defiende aludiendo que aquel fracaso se debió a la falta de coraje de sus lacayos, además confiesa que no esperaban un ataque directo pues se suponía que la locación de sus prisioneros era secreta. Shadow Weaver se harta de sus disculpas y su imagen se vuelve corpórea por un momento solo para desplegar una poderosa ráfaga de energía contra su sierva, quien es lanzada brutalmente por los aires hasta chocar con una de las columnas de la habitación.

Cuando cae al suelo, Scorpia se retuerce de dolor y escupe un líquido verde, al percatarse de esto, ruje de ira, pero la malvada hechicera ignora su agonía y le exige que se deje de excusas tontas, pues era ella la encargada de las tropas y como tal, es la única responsable por la derrota y continúa diciéndole que la ha decepcionado ya que pensaba que una aberración como ella podría haber acabado sin mayor esfuerzo con un grupito de granjeros rebeldes. Los ojos de Scorpia se llenan de indignación y su pecho arde con el coraje que Shadow Weaver dice haberle faltado en batalla, pero el dolor le impide hablar y mientras se reincorpora solo escucha las advertencias de su ama, que la amenaza con que será más drástica la próxima vez que falle, pues la necesita más que nunca ahora que ha perdido el don de las visiones de Peekablue y no puede predecir los movimientos de sus enemigos así que será mejor que no fracase ni una sola vez más, dicho esto la imagen se desvanece junto con el humo.

Scorpia camina humillada, en su interior desea a gritos que llegue el momento oportuno en que la bruja se descuide para que ella pueda clavarle su aguijón y callarla para siempre, una vez que sale del salón de los reyes, se cruza con un ogro que carga una estatua de mármol, ella prefiere ignorarlo aunque es tanta su indignación que podría asesinarlo junto a todos los de su especie para así compensar la paliza que recibió por culpa de ellos, pero decide dejarlo ir y concentrar su atención en planear su venganza contra Shadow Weaver.

El ogro deja la estatua en el suelo y se cerciora que nadie esté alrededor, entonces un flash de energía verde emana de su cuerpo, el cual cambia por el de una hermosa joven vestida con una ligera armadura color esmeralda, cuya larga cabellera rubia sujetada en una alta cola de caballo, que emerge de su casco de guerra, se ondea como una serpiente mientras ella camina tranquilamente por las instalaciones del palacio hasta llegar a una pared que sostiene en alto el cuadro de los reyes Miccah y Angella junto a su hija Glimmer. Los ojos verdes de esta muchacha se posan en la imagen de la heredera de Bright Moon y esbozando una pequeña sonrisa se repite así misma que todo está yendo de acuerdo a lo planeado.

Mientras tanto, a pocos metros del castillo Bright Moon, se encuentra el grupo de asalto rebelde dirigido por Bow y Glimmer, que son acompañados por Fluterinna, Spinnerella, que se lamenta porque su mejor amiga Netossa no los acompañó en esta contienda, y algunos valientes guerreros Etherianos.
El estar cerca a su hogar trae muchos recuerdos a Glimmer y lamentablemente no todos son buenos, pues a su corta edad ella ha sido víctima emocional de una constante e incansable batalla. Además, ella ha vivido prácticamente sin una familia, pues el rey Miccah, su padre, se marchó junto a sus tropas para luchar contra la Horda en el espacio cuando ella era muy pequeña y el crecer en tiempos extremos le fue difícil a pesar de la protección de su madre, la reina Angella, quien la ayudó a desarrollar sus habilidades mágicas para defenderse en caso sucediera algo malo.

El destino luego se encargaría de que Glimmer encontrara una verdadera familia en la Gran Rebelión, a quienes se unió como su líder cuando su reino fue invadido por la Horda y su madre desapareció en batalla. Ella libró grandes peleas junto a Bow, Madame Razz y los Twiggets en contra de sus enemigos, pero secretamente ansiaba la oportunidad de vivir una vida tranquila en su palacio junto a sus padres y disfrutar de los descubrimientos y situaciones que ofrecen la adolescencia misma, pero la responsabilidad era demasiada como para detenerse a siquiera soñar con su primer beso o asistir a algún baile y conocer a un apuesto príncipe, o tener amigas de su edad, Glimmer no podía darse ese lujo.

No obstante, la oportunidad de vivir un poco los anhelos de su corazón llegó con la aparición de dos mujeres cuyo valor equilibrarían la balanza del lado del bien: She-Ra, una diosa guerrera que se opuso a la Horda y rescató a la reina Angella de las garras de las Harpías, y Adora, la ex capitana enemiga que buscando redención se unió a los Rebeldes y a quien Glimmer, a pesar de la controversia y los comentarios en su contra que se generaron, le cedió el liderazgo como un gesto de confianza y amistad.

Bow nota que la nostalgia está jugándole una mala pasada a la mujer que ama, y rápidamente se le acerca y sosteniendo sus manos le recuerda que no es momento de bajar la guardia, pues eso va a afectar su concentración en la pelea. También le pide reconsiderar perdonar a Adora, al mencionarla, la tierna mirada de Glimmer cambia por una de aspecto fuerte, ocultando realmente su arrepentimiento por atacarla, pero no piensa hablar de eso y solo alcanza a decir que él tiene razón, que solo debe pensar en ganar esta batalla y para ello debe dejar de lado cualquier sentimentalismo absurdo.

De pronto, el momento de charla es interrumpido cuando tres Harpías descienden del cielo y se lanzan sobre ellos a gran velocidad, Bow empuja a Glimmer hacia un lado para evitar que la ataquen y es él quien recibe la embestida de una de las criaturas aladas, con la que rueda por el suelo y lucha ferozmente para evitar ser mordido o rasguñado por esta. Cuando Glimmer se dispone a utilizar una ráfaga de energía para ayudarlo a quitarse al monstruo de encima, él la detiene gritando que la luz solo llamará más peligros.

Entonces, Fluterinna levanta el vuelo con la intención de atraer la atención de las otras dos criaturas para alejarlas de sus amigos pero solo una la sigue y la otra busca hambrienta a una víctima que pueda devorar, sin embargo cuando voltea para escoger a su presa, no encuentra a nadie, pues Glimmer mantiene ocultos a sus fieles guerreros con su poder para desviar la luz y proyectar invisibilidad sobre ellos, protegiéndolos, pero cuando notan que no pueden engañar al olfato de la bestia, Spinnerella entra en acción y se dispone a batallar con la criatura.
Mientras, Bow logra crear una breve distancia entre él y su feroz rival impulsándose con ambos pies en el abdomen de la bestia, que cae estrepitosamente de espaldas al suelo, el valiente arquero alcanza dos flechas de su estuche y se lanza contra el animal, al que le clava una saeta en el ojo y la otra dentro del oído, dando fin a su brutal existencia.

En el cielo, Fluterinna domina con gracia las corrientes de aire, debido a su esbelta figura y sus agraciadas alas multicolor ella adquiere grandes niveles de velocidad, lo que la hace difícil de alcanzar por la grotesca criatura alada, cuya hambre y sed de sangre aumenta cada vez más cegando sus sentidos, pues no se percata que Fluterinna la conduce hacia una montaña de rocas filosas, con la cual termina estrellándose cuando la bella rebelde se convierte en una pequeña mariposa y cambia de dirección en el acto.

De regreso al suelo, la gran agilidad de Spinnerella la salva de ser empalada por la filosa arma de la Harpía que arremete con furia contra la danzarina que gira rápidamente esquivando cada ataque, finalmente ella aumenta la potencia de su giro el cual absorbe a la criatura, que paralizada por el pequeño torbellino púrpura en el que se encuentra pierde el control total de sus movimientos y es lanzada muy lejos de allí.

Los Rebeldes se reagrupan para verificar que no haya ningún herido y ante ellos aparece una cuarta Harpía que avanza jadeante, Bow alista su arco para un tiro certero, pero la criatura de pronto se ve envuelta en un resplandor verde y se transforma rápidamente en la doncella esmeralda de cabellos dorados que había estado dentro del palacio de Bright Moon y a quien Glimmer reconoce como Double Trouble, su prima hermana y princesa de Green Glade, un pequeño reino vecino de Bright Moon.

El cambio de apariencia parece no causar ningún efecto positivo en los guerreros rebeldes y mucho menos en Spinnerella, pues a juzgar por la expresión de sus caras, al parecer hubieran considerado a la Harpía una mejor opción, al menos conocían las intensiones de la criatura. Bow se percata de esto y en cierta medida los entiende pues Double Trouble si bien es una rebelde, ha pasado mayor tiempo con los Hordeanos en misiones de espionaje, sin embargo esto generó gran desconfianza en los pobladores, que aludían que ella finalmente escogería el bando más fuerte. De igual manera piensa la rebelde de vestidos de seda púrpura, que alguna vez fue engañada por las fuerzas de Hordak y no piensa dejar que eso suceda nuevamente.

A Double Tropuble no le incomoda para nada la fría bienvenida, es más está acostumbrada a ello y solo centra su atención en Glimmer, pero la heredera de Bright Moon no piensa permitir que traten a su única familia como a una intrusa y dirigiéndose a su equipo, les exige respeto y gratitud con su prima, ya que debido a sus reportes ellos pudieron localizar la base de los Ogros donde mantenían prisioneros a muchos de sus familiares, entre los cuales también estaba Netossa, quien decidió no a acompañarlos en esta pelea cuando más la necesitan, finaliza la princesa mirando fijamente a Spinnerella.
Bow interviene y logra apaciguar la situación, él les pide que hagan sus diferencias a un lado y escuchen a Double Trouble, pues no se habría arriesgado en vano sino tuviera algo importante que decirles.

La espía les informa de que Scorpia y sus guardias vigilan celosamente el palacio, pero que ella puede guiarlos a través de un acceso libre de seguridad hasta la cámara principal, siempre y cuando exista una buena distracción. Entonces, Glimmer revela que su plan es llegar hasta la piedra lunar, pues una vez que la tenga en su poder contará con la fuerza suficiente para hacer frente a Shadow Weaver.
Los rebeldes se ponen de acuerdo y deciden que lo mejor será dividirse en dos grupos: uno, liderado por Spinnerella quien junto a los soldados se encargarán del ataque frontal para atraer la atención de los guardias, mientras que Bow, Glimmer y Flutterina se infiltrarán en la mágica fortaleza con la ayuda de Double Trouble.

Momentos después, cuando ambos equipos se encuentran en sus posiciones respectivas. Bow dispara una flecha explosiva que causa gran impacto al grupo de ogros guerreros que vigilaban la entrada del castillo. Esto sirve de señal para Spinnerella que inicia la batalla con un aguerrido grito, ella gira con gran velocidad y con el viento que genera impulsa a sus valientes compañeros Etheriano, los que se lanzan armados sobre las bestiales criaturas que aún permanecen aturdidas por las flechas explosivas.

Al momento que una segunda escuadra de ogros sale a enfrentar a sus atacantes, Double Trouble corre hacia la parte posterior del palacio y en cuestión de segundos se convierte en una de las criaturas a las que ataca desprevenidas utilizando sus propias armas.
La habilidad de cambiar de forma de la rebelde espía, sorprende de sobremanera a Bow, que le pregunta a Glimmer cómo es que su prima puede hacer eso. Ella responde que Trouble nació con un don latente para controlar la luz, y este le permite crear ilusiones para transformarse virtualmente en lo que desee.

Una vez que el perímetro está asegurado, Double Trouble utiliza sus manos para indicarles que avancen. Mientras que en el campo de batalla, al ver que están siendo superados en números, Spinnerella sin dejar de girar recoge dos hachas, una del suelo y otra del pecho de un monstruo caído, y contraataca contra el ejército enemigo arrasando con todo a su paso, convirtiéndose en una armada de una sola mujer.

Y dentro del castillo, Glimmer y su equipo, de manera cautelosa, siguen los pasos de Double Trouble hasta llegar al salón de los reyes, ella recomienda que Flutterinna investigue si no hay nadie del otro lado, Bow le promete a su amiga que ellos entrarán si ella no regresa dentro de 15 segundos. La rebelde con alas de mariposa se encoge hasta adquirir el tamaño de un meñique y con gracia desaparece entre las ranuras de la puerta dorada.
El arquero sujeta la mano de su princesa y juntos inician la cuenta, al ver que los segundos avanzan, se impacientan e intercambian miradas nerviosas pues su amiga no sale de aquel lugar. Entonces, sin importar que pudieran encontrar del otro lado de la puerta, ellos irrumpen rápidamente en el gran salón que alguna vez perteneció a los padres de Glimmer, solo para encontrarse rodeados por varios ogros armados y a Flutterinna enroscada en la cola de Scorpia, que con gesto de satisfacción lame la cara de su víctima y les dice que los estaba esperando.

De pronto, Bow y Glimmer son atacados por una potente descarga eléctrica que los alcanza por la espalda y los paraliza, forzándolos a caer al suelo. Antes de que los hermosos ojos azules de Glimmer se cierren por el dolor, ella logra ver el rostro de su atacante y el dolor por la decepción es más fuerte que el que siente en todo su cuerpo, pues se trata de Double Trouble, cuya vestimenta ahora refleja los emblemas y colores de Shadow Weaver. La traidora solo sonríe de manera perversa, y se repite así misma que todo está yendo de acuerdo a su plan, en ese momento la oscuridad alcanza a Glimmer y la abraza dejando en ella una gran incertidumbre, pues no sabe si llegará a despertar o peor aún, cuando lo haga, que encontrará.